Conocida en sus inicios como “música de amargue”, es una música popular de guitarra basada en el ritmo del bolero, con elementos de merengue, son, vals y ranchera. Etimológicamente, la palabra es de origen africano y designa la juerga, el jolgorio y la parranda, según el etnólogo cubano Fernando Ortiz. En la República Dominicana hay discrepancias sobre sus inicios, aunque la idea predominante es que se debe a José Manuel Calderón, quien presentó a comienzos de la década de 1960 algunas de las canciones más representativas (Amorcito de mi alma, Luna, Serpiente humana). En este período tienen una participación destacada Rafael Encarnación y Luis Segura (el Añoñaíto). Radio Guarachita, dirigida por Radhamés Aracena, jugó un papel importante en la difusión del género. Inicialmente, la bachata se difundía sobre todo mediante las velloneras. Un momento importante del género son las grabaciones de Blas Durán, a partir de 1987. Luego, surgieron los grandes intérpretes del nuevo estilo: Anthony Santos, Luis Vargas y Raulín Rodríguez. Luis Vargas aportó una armonía diferente a la que originalmente poseía la bachata. Posteriormente, Anthony Santos incorporó un nuevo lenguaje en el empleo de la guitarra y la percusión. Luis Días, en los años 80, y Juan Luis Guerra y Víctor Víctor, en los años 90, contribuyeron con una estética más rica. El género actualmente goza de gran popularidad, ha penetrado todos los estratos del país y tiene una amplia presencia internacional.